Proyecto: Goldshire

Para los que no saben de qué se trata este cuadro, esta es una obra basada en la zona inicial de la facción de la Alianza en el juego World of Warcraft.

Goldshire (fanart no oficial), Oil on cotton canvas

Goldshire es uno de los pocos paisajes que he hecho. Usualmente no soy una persona que un día se levanta y diga “wow, que excelente día para comenzar a pintar un paisaje”. Siempre me he inclinado más a pintar retratos o personajes, ya sean de fantasía o personas de la vida real, o incluso animales, pero casi nunca paisajes o escenarios.

Un día Antonio (mi esposo) me sugirió la idea de pintar un paisaje y yo me quedé con esa idea dando vueltas por mi mente. Todo esto se dio mientras yo estaba tratando de sobreponerme a una situación complicada con el cuadro de Castlevania que estaba pintando, así que decidí liberar mi mente un poco con un proyecto diferente y creo que ha sido una de las experiencias de pintura más satisfactorias y relajantes que he tenido.

Pintar paisaje no tiene las restricciones que conlleva pintar un rostro ni la presión de que se vea anatómicamente correcto. No debo preocuparme mucho por proporciones o por equivocarme en una hoja o una rama porque así es la naturaleza, caótica y a la vez hermosa. Así que me sentí muy motivada por dejarme llevar con esta obra, la cual terminé en las últimas dos semanas del año 2021.

Es mi intención con este artículo mostrarte todos los pasos que tomé para lograr esta obra, desde la preparación del canvas, pasando por el dibujo, la imprimatura, y las distintas capas en su orden específico, incluso desde un paso más antes que es la planeación de la obra con un mockup digital.

Que bueno que la Stephanie del pasado tomó fotos y videos de todo el proceso, ya que en este momento no podría enseñarte nada! Y las imágenes son muy muy importantes para dar a entender nuestras ideas. Es muy probable que pronto este post se convierta en un video, así que búscalo en mi canal de YouTube pronto.

 

Del Mockup A La Obra Final

Una vez escuché decir a Howard Lyon en uno de sus videos que nunca debemos meternos en problemas a la hora de pintar. Pero a qué rayos se refería? Pues resulta que meterse en problemas es comenzar algún proyecto sin tener clara la meta. Se puede aplicar en muchos ámbitos por supuesto, pero dentro del contexto de la pintura meterse en problemas significa comenzar a pintar sin saber qué voy a hacer, qué composición voy a crear, cuáles colores voy a usar… Es básicamente pintar sin un mapa.

Ahora, hay muchos tipos de pintura donde más bien es un requerimiento crear así, sin ideas previas, pero si queremos crear una obra con un sentido específico y que explique algo específico, debemos tener un planeamiento previo. Así cuando estemos en media obra y no sepamos qué hacer con una esquina revoltosa, tendremos una especie de guía que nos ayude a completar la pintura de una manera más eficiente. Digamos que es como hacer un TO DO list para completar tareas en vez de querer hacerlo todo a la vez y morir en el intento.

Así que para lograr la visión que tenía en mi mente, debía comenzar creando ese mapa a seguir: un mockup digital semi detallado.

Mi boceto digital inicial fue un mamarracho horrible, pero me basé en él para hacer un photo bashing de imágenes, terminando con un poquito de pintura digital y corrección de luces y colores.

Una vez que ya tenía mi mapa detallado para comenzar, me puse manos a la obra con el canvas, el soporte que iba a usar. Como quería hacer un cuadro grandecito, no podía hacerlo en madera porque sería imposible de mover, y aún no había descubierto el ACM en esa época, así que decidí reusar un marco que tenía, comprar canvas de algodón y estirar mi propio bastidor. Pintar sobre canvas no es de mi preferencia, no me gusta mucho la textura ya que prefiero pintar sobre una superficie más lisa, pero en ese momento pues era lo que había.

Una vez estirada la tela transferí el dibujo al canvas con el método de cuadrícula, tracé líneas iniciales con óleo y pasé una capa muy disuelta de pintura por encima de todo. Luego, con una toalla de papel me dediqué a “borrar” las luces y a crear los tonos más claros de la obra, los cuales estaban en el cielo y el lago. Para terminar el underpainting o primera capa de óleo, apliqué del mismo color Burnt Sienna que estaba usando para los tonos más oscuros, creando así un Bistre, que es el término con el que se conoce esta técnica.

Si quieres saber más sobre la Imprimatura o el Underpainting y para qué rayos sirve, puedes leer este otro artículo.

 

Una vez que ya el underpainting está seco, podemos comenzar a pintar la primera capa de óleo. Cada artista tiene su propia forma de pintar paisajes, pero a mí me gusta pintarlos como en orden, de atrás para adelante. Esto me asegura que cada capa que vaya pintando va a quedar encima de la capa anterior.

Con esto en mente, comienzo por pintar el cielo y las montañas ya que tienen tonos muy parecidos. Esta primera capa de color no lleva todavía detalles, es bastante tosca y la uso para definir las formas generales de los elementos. Continúo con los árboles del fondo, las casitas, el lago y por último el árbol al frente, todo con una capa básica de color. La idea es lograr cubrir todo el cuadro con esa primera capa para luego concentrarse más en los detalles, en vez de estar batallando con la iluminación de los elementos por separado.

Cuando se tiene esa primera base se vuelve mucho más satisfactorio comenzar a pintar los detalles encima. Fue una experiencia interesante pintar los edificios, porque como te dije antes, no es algo que esté acostumbrada a pintar. Batallé un poco con ellos pero al final quedé satisfecha con el resultado.

Para el árbol del frente quise tener bastante textura en las ramas y el tronco, así que después de cada sesión de pintura recogía la pintura que sobraba y la iba colocando con espátula sobre el tronco. Así cuando ya estuviera lista para pintar el árbol, que sería el último elemento por pintar, ya iba a tener una textura decente para llegar solamente a darle color. La cereza en el pastel fueron las hojas del árbol, donde intenté hacerlas con una técnica de impasto.

Goldshire (fanart no oficial), Oil on cotton canvas

Goldshire: Resultado final

Este proyecto me hizo darme cuenta que disfruto muchísimo pintar paisajes, al menos de lugares fantasiosos que solo existen en mi cabeza. Actualmente este cuadro se encuentra en México junto a otros cuadros de artistas costarricenses, pero mi plan es mandarlo a traer pronto porque a verdad lo extraño demasiado.